Hace millones de años, los abetos abundaban por toda Europa y el norte de África. Con el deshielo, hace unos 20.000 años, estos abetos fueron reduciéndose a zonas altas y frías. A lo largo de miles años, estos supervivientes fueron adaptándose al medio, evolucionando con respeto a sus congéneres en otras zonas y latitudes.

[n El Pinsapo] (Abies Pinsapo) es una especie arbórea de la familia de las Pináceas, del que solo quedan en España tres núcleos principales en las sierras altas del extremo occidental de la Cordillera Bética, en este caso en la Sierra del Pinar de Grazalema, el cual forma una masa compacta de más de 400 hectáreas.

No es hasta el año 1977 cuando la UNESCO declaró al Pinsapar de Grazalema y su entorno como “Reserva de la Biosfera”. El 13 de Febrero de 1985, la Junta de Andalucía creó el [n Parque Natural de la Sierra de Grazalema], donde el pinsapar ocupa el área de reserva, contribuyendo a la recuperación del pinsapar.

Gracias a las condiciones climáticas que se dan en esta zona, uno de los puntos con mayor índice pluviométrico de España, se desarrolla uno de los escasos bosques de pinsapos del mundo, los cuales crecen a 1500 metros de altura aproximadamente llegando a medir hasta 30 metros y viviendo unos 400 años.

[n La ruta de senderismo El Pinsapar] nos adentra en un paraje insólito, un vestigio de aquellos tiempos milenarios donde estas joyas de la botánica gobernaban el paisaje. Un bosque denso y umbrío donde la escasa luz llamará nuestra atención, en el que los ejemplares compiten por la luz, dejando sin hojas sus ramas bajas y en la parte superior poder ver a buitres volando en círculos, observándonos atentamente. Desde este punto de la provincia las vistas son soberbias, permitiéndonos ver la Serranía de Ronda, la Zona de Reserva del Parque Natural de la Sierra de Grazalema y el pico más alto de Cádiz, el Torreón.

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